Para la contención de excavaciones es posible utilizar muros colados en el lugar, conocidos como muros Milán, generalmente de 60 cm de espesor, con algunas variantes para cada caso.

Usualmente estabilizamos la excavación con lodo bentonítico o polímeros, construyendo el muro en una secuencia alternada entre paneles primarios y secundarios.

Dentro de las opciones que ofrecemos están los muros precolados, cuando las restricciones en espacio limitan el ancho del muro, además de proporcionar un acabado definitivo en la cara interior de éste.

Con una técnica de excavación similar ejecutamos pantallas, que se utilizan para cortar el flujo de agua en el suelo, por lo cual se construyen con mezclas de cemento-bentonita-agua, con baja permeabilidad, además de ser auto cicatrizantes.